Para presentar una boca saludable, no sólo debemos preocuparnos de los dientes, sino que además, debemos colocar especial énfasis en todos los elementos que los rodean.
Los dientes están formados por 4 tejidos: esmalte, dentina, cemento y pulpa.
Por lo tanto, es importante cuidar la boca de las enfermedades que pueden desarrollarse:
Producen la pérdida de los tejidos del diente por la acción de los ácidos producidos por las bacterias que destruyen al esmalte, dentina y pulpa, produciendo un daño irreversible en el diente.
Ocasionan la inflamación y destrucción de las encías, pérdida del hueso alveolar, movilidad dentaria y formación de úlceras.
El herpes, la gonorrea, la sífilis e incluso el VIH, pueden transmitirse por vía oral.
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